Ocho fueron las veces que combatió el recién fallecido Ricardo Cardona por título mundial: dos veces intentando ganarlo, saliendo victorioso en una oportunidad, y con cinco defensas exitosas, más una derrota que lo despojó de su corona.

El 7 de mayo de 1978, Ricardo Cardona se presentó al Gimnasio Changchung, en Seúl, Corea del Sur, con 15 peleas ganadas, 4 derrotas y un empate en su haber. Además de unas ganas inmensas de cambiar para siempre su destino.  

El rival para esa pelea fue el local Soo-Hwan Hong, en ese momento portador del cetro de campeón. La pelea fue exigente y el de San Basilio de Palenque castigó de principio a fin con furia el cuerpo del asiático.

Finalmente, el coreano no aguantó más la presión del colombiano y en el asalto 12, al minuto 1:23,  le dijo al referí Tony Pérez que se retiraba del combate. De esa manera llegó el tercer título mundial de boxeo para Colombia.

Cuatro  meses después, defendió el título en la Plaza de Toros de Cartagena, donde se midió al también colombiano Rubén Valdés. En esa oportunidad, las tarjetas avalaron su reinado, por marcador 145-144, 146-145 y 148-146.

Antes de finalizar el año, el 12 de noviembre, Cardona condujo su mirada de nuevo a territorio asiático para su segunda defensa. En esa oportunidad se midió en el tinglado ante el coreano Soon-Hyun Chung nuevamente en el Gimnasio Changchung.

En esa oportunidad se impuso por dedición mayoritaria ante su rival, con tarjetas 147-145, 145-150 y 145-143. El resultado generó gran polémica por lo que rápidamente se pactó la revancha para el 23 de junio de 1979.

Repitiendo escenario, Cardona hizo gala de sus mejores combinaciones para acreditarse el triunfo por decisión unánime con marcador 146-145, 146-144 y 146-144. Hasta ese instante, tres defensas y todo a favor.

La cuarta pelea en procura de la retención se llevó a cabo  aún más al oriente. En las milenarias tierras del Japón, ante el local Yukio Segawa. Esta defensa tomó por escenario el Gimnasio de la Ciudad de Hachinohe, en la provincia de Aomori.

Aquel combate volvió a dejar a Ricardo con el cinturón acomodado. Los jueces vieron ganador sin inconvenientes al palenquero, que parecía comenzaba a generar las expectativas de un largo reinado. Los jueces dieron un dictamen de 145-139, 147-140 y 147-146. A Todas luces una paliza, el único que no dio la ventaja amplia: fue un juez japonés.

Tras esto, Cardona se había cansado de largos viajes y peleas en latitudes muy alejadas de su hogar. Por ello, el escenario para la quinta defensa sería nuevamente la Plaza de Toros de la Ciudad de Cartagena. Allí se midió al argentino Sergio Víctor Palma.

Nuevamente el colombiano hizo gala de toda su capacidad. Fue deslumbrante. Demostró que tenía grandes condiciones e hizo presagiar que todavía tenía mucho por dar. Tras una exhibición de 15 asaltos, venció por unanimidad  145-141, 146-145 y 147-145.

Tras cinco defensas, en las cuales demostró que era digno campeón, llegó la fatídica sexta pelea.

Leo Randolph, un joven norteamericano seis años menor que Cardona tuvo el atrevimiento de retarlo por un combate mundialista, pleito que se cumpliría  en la ciudad Seattle en el Coliseo Central de la Ciudad.

Allí las cosas cambiaron de una manera brutal. El norteamericano, realmente fue mejor. Las tarjetas de los jueces daban cuenta de un mejor rendimiento al momento en que sobrevino el nocaut. Así es, tal y como llegó el título, así se fue: por la vía del KOT. Para acrecentar el malestar, este llegó en el asalto 15… de 15 pactados.

Podría decirse que Cardona fue un campeó duro de desbancar y que hasta el final del castigo se mantuvo de pie, cuando ya no logró soportar más.

De allí en adelante, peleó en dos ocasiones más, hasta cuando logró obtener una nueva oportunidad mundialista, esta vez frente a un rival que ya había vencido, el argentino Sergio Víctor Palma.

Sin embargo, la historia fue muy diferente, Palma había ganado experiencia y forma desde el último desafío en Cartagena, además organizó el combate en su casa, el estadio Luna Park de Buenos Aires, el 15 de agosto de 1981.

Así las cosas, al minuto 1:44 del doceavo asalto, Cardona perdió por Nocaut. Era fin de sus aventuras mundialistas.

Sin embargo, la enjundia le alcanzó para tres años más de combates, hasta su retiro el 30 de junio de 1984, cuando perdió su última pelea en la Ciudad de Panamá a manos del local Jorge Luján.

Ese sábado, 31 años después de ese combate, Cardona se subió el ring y dio otro gran combate. Demostró su furia. Pero finalmente, contra la muerte nadie gana. Aunque sí puede morir con todos los honores como lo hizo él: como un campeón.